En pleno Valle del Tena, Sallent de Gállego es un típico pueblecito aragonés que ofrece un paisaje de ensueño. Situado a orillas del Embalse de Lanuza, a más de 1.300 metros de altitud, podemos disfrutar, además de un clima estupendo en verano, de unas vistas increíbles de todas las montañas que lo rodean.Históricamente, Sallent de Gállego y Lanuza conformaban el Quiñón de Sallent, uno de los tres territorios en los que se dividía administrativamente el Valle de Tena. Desde entonces, este pequeño municipio ha mantenido el encanto de otra época. Sus calles, sus edificios y sus paisajes llevan a quienes se acercan a este lugar a un mundo lejos del caos donde relajarse y respirar un poco de aire puro.
Un buen lugar para comenzar la visita es la Plaza del Mentidero, donde se sitúa la Oficina de Información y Turismo. Esta plaza toma su nombre de un banco cubierto, situado justo detrás de la caseta de información, donde se reunían los habitantes del pueblo a charlar (y, según parece, a contar mentiras). Justo encima del banco se encuentra también un mural que recoge los escudos heráldicos de las familias más importantes de la población.
Banco en la Plaza del Mentidero (Sallent de Gállego, Huesca) |
Justo detrás de esta plaza encontramos el Ayuntamiento, donde podemos observar una estatua a tamaño real de Fermín Arrudi, conocido como «El Gigante de Sallent», debido a su 2.29 metros de altura (todo un récord a finales del siglo XIX).
Estatua del Gigante de Sallent (Sallent de Gállego, Huesca) |
Si continuamos nuestro paseo por la villa, que cuenta con unos 1.500 habitantes, encontraremos la Iglesia de la Asunción, edificada a principios del siglo XVI sobre los restos de una ermita románica. Se trata de una bella iglesia de estilo gótico tardío, donde se encuentra la Virgen de las Nieves, patrona de la villa.
Iglesia de la Asunción (Sallent de Gállego, Huesca) |
Interior de la Iglesia de la Asunción (Sallent de Gállego, Huesca) |
Después de visitar los edificios más emblemáticos de Sallent podemos dirigirnos hacia la parte baja de la población, donde encontraremos el Puente del Paco, construido en mampostería durante el siglo XVI. Si tenéis hambre y queréis descansar un rato, al lado del puente encontramos una zona de picnic con parque infantil, por lo que éste sería el lugar ideal para reponer fuerzas.
Puente del Paco (Sallent de Gállego, Huesca) |
Cruzando el puente, podemos subir a la parte alta del barrio aquí situado y, en unos 15 minutos llegaremos hasta el Mirador de San Mamés, un pequeño cerro que nos ofrece unas impresionantes vistas, tanto de la población de Sallent, como del Embalse de Lanuza y de la población del mismo nombre. Las mejores vistas las obtenemos en días soleados cuanto el Embalse se encuentra en su máxima capacidad, aunque cualquier momento es bueno para disfrutar de la panorámica.
Vistas desde el Mirador de San Mamés (Sallent de Gállego, Huesca) |
Si os gusta el esquí y los deportes de invierno, en el municipio de Sallent de Gállego se encuentra la estación de Aramón Formigal. Durante los meses de nieve, el lugar se convierte en un bullicio de gente deslizándose por las laderas de las montañas. Si no hay nieve, siempre podéis subir hasta Formigal para disfrutar del paisaje y para visitar la Iglesia del Salvador de Basarán, de estilo mozárabe que data del siglo X.
Estación de Esquí de Formigal (Huesca) |
Los más calurosos preferirán visitar Sallent en verano. Un buen momento para ello es aprovechando la Feria de las Brujas, Mitos y Leyendas del Valle del Tena, que tiene lugar el segundo fin de semana de junio, con talleres, exposiciones, pasacalles y actividades para todos los públicos. La Fiesta Mayor, en honor de la Virgen de las Nieves, se celebra en torno al 5 de agosto. Entre los numerosos actos que se organizan, cabe destacar el Ondeo de la Bandera, en el que los mozos sallentinos hacen girar el mástil del pendón de la villa.
Sallent de Gállego, Huesca |
A aquellos a los que les guste el montañismo y la naturaleza les aconsejamos la ascensión al macizo de Balaitús, también conocido como Pico os Moros, cuyo punto más alto tiene 3.144 metros de altitud. Desde Sallent se puede subir por dos rutas, ambas de bastante dificultad si no se cuenta con cierta experiencia y material adecuado.
2 Comentarios
Carolina
Tengo reservado para la semana que viene y se me está haciendo eterna la espera. Un sitio precioso, sin duda
Marta
¡Precioso! Ideal para una escapada de relax