Si nos sigues por Instagram, ya sabrás que hemos pasado unos días disfrutando de las maravillas del Pirineo Aragonés. También habrás visto algunas pinceladas de los rincones que hemos conocido, y seguramente te habrás quedado con ganas de que te contemos todos los secretos. ¡Y para eso Instagram se queda corto! Así que no vamos a dar más vueltas… ¡vamos a descubrir el desconocido Valle de Vió!

¿Dónde está el Valle de Vió? ¿Cómo llegar?

Este recóndito valle se encuentra al norte de la provincia de Huesca, en pleno Pirineo Aragonés. La región se encuentra bañada por los ríos Aso, Yesa y Bellós, lo que la dota de unos paisajes y una belleza fascinante. No en vano, gran parte del territorio del Valle de Vió pertenece al Parque Nacional de Ordesa y Monte Perdido, una de las joyas indiscutibles de Aragón.

Tal y como suele ocurrir en prácticamente todas las pequeñas poblaciones de nuestro país, la manera más práctica (que no la mejor para el entorno) para llegar hasta nuestro destino es el coche. Desde el sur, te recomendamos acceder tomando el desvío en Escalona. Circula con precaución por la carretera que te llevará hasta cada uno de sus pueblos, repleta de curvas pero rodeada de bellísimos paisajes. En cambio, si accedes desde el Oeste, tendrás que dirigirte hacia Broto, seguir hasta Sarvisé y allí tomar el desvío indicado hacia tu destino.

¿Qué ver en el Valle de Vió?

Antes que nada, y para evitar que nos taches de crearte falsas expectativas, queremos dejar claro que en esta zona no encontrarás grandes monumentos ni infraestructuras. Lo que sí encontrarás es un paraje natural impresionante, repleto de rutas en las que realizar senderismo y respirar aire puro. También encontrarás pequeños núcleos de población, con ermitas e iglesias a la altura de su población (es decir, de reducido tamaño). ¿Quiere esto decir que no vale la pena visitarlo? Para nada. Como siempre, depende de gustos y preferencias. Si buscas disfrutar de unas vacaciones en plena naturaleza, sin contaminación lumínica que te impida ver las estrellas y lejos del ruido infernal de la ciudad, el Valle de Vió es tu destino. Dicho esto… ¡Vamos a recorrer algunos de sus núcleos de población!

Fanlo

Hablar de Fanlo es hablar del Valle de Vió. No en vano, se trata de la población que ostenta su capitalidad y que concentra la mayoría de sus núcleos de población. Nada más acercarnos al pueblo ya podemos ver algunas de las singularidades que distinguen este valle de otros: casas de piedra rematadas con tejados de loseta gris y coronadas por chimeneas cónicas, características de esta zona del Pirineo. ¡Las encontrarás en cualquier pueblo del Valle de Vió!

Calles de Fanlo (Valle de Vió, España)
Calles de Fanlo (Valle de Vió, España)

Te recomendamos pasear por Fanlo sin rumbo fijo, dejándote llevar por el entramado de tus calles. Es imposible perderte en un pueblo tan pequeño, así que levanta la vista y disfruta de él. Seguro que durante tu paseo te topas con alguna de las casas señoriales como la Casa del Señor o la Casa Ruba (de la que destaca su torre defensiva cilíndrica). Ambas casas se caracterizan por ser originarias del Siglo XVI, así como por haber sufrido numerosas modificaciones a lo largo de los siglos para adaptarse a las necesidades de sus habitantes.

También te toparás con las dos iglesias de Fanlo (por desgracia, cerradas durante nuestra visita). La primera, la Iglesia de Nuestra Señora de los Dolores, se encuentra situada en el centro del pueblo. Se trata de un templo barroco, con muros enlucidos en su interior que le aportan luminosidad y resaltan su austera decoración. Por otro lado, en la parte baja del pueblo te cruzarás con la Iglesia de los Tres Santos Reyes, un templo de finales del Siglo XVI construida sobre un templo románico anterior. Por desgracia, poco queda aquí de su esplendor de otros tiempos. El retablo y los tapices de Bruselas que adornaban sus paredes se encuentran actualmente en el Museo Diocesano de Barbastro, tratando de protegerlos del abandono sufrido por el templo. ¡Lástima no poder disfrutarlos in-situ!

Iglesia de Nuestra Señora de los Dolores (Fanlo, España)
Iglesia de Nuestra Señora de los Dolores (Fanlo, España)

Qué ver cerca de Fanlo

Muy cerca de Fanlo encontramos el Bosque de la Pardina del Señor (también llamado de la Pardina Ballarín), considerado uno de los bosques más bonitos de toda España. Su belleza se magnifica en otoño, momento en el que la naturaleza tiñe los árboles de distintos tonos de rojo y ocre. Desde el mismo pueblo también podrás tomar un sendero de poca duración que te llevará hasta el Barranco las Gloces, uno de los sitios favoritos de muchísimos aventureros para practicar barranquismo. Te atrevas o no a deslizarte por el barranco, las vistas del río desde este punto son más que recomendables. Nosotros aprovechamos para meter los pies en el agua mientras disfrutábamos de los sonidos de la naturaleza y de la belleza que nos rodeaba.

Nerín

Después de disfrutar de este rincón tan maravilloso, regresamos al coche para poner rumbo a nuestro próximo destino. A tan solo 8 km de aquí encontramos Nerín, otro de los núcleos de población pertenecientes a Fanlo. Al igual que el resto de pueblos este valle, se caracteriza por su reducido tamaño y su aspecto anclado en el tiempo. Nada más pasear por sus calles, ya podrás sentir el origen medieval de este lugar. La mejor muestra de esta época es, sin duda alguna, la Iglesia de San Andrés, que junto a las imponentes montañas que rodean Nerín conforma la más bella estampa del municipio.

Si te gusta visitar edificios en ruinas, te recomendamos acercarte a la vieja Ermita de Santa María. Situada a tan solo unos pasos del pueblo (unos diez minutos), este pequeño templo románico conserva de forma sorprendente todavía su ábside cubierto, así como un gran arco apuntado que nos ayuda a hacernos una idea de cómo era la construcción en su momento de máximo esplendor. Por supuesto, si visitas este lugar debes hacerlo con precaución y teniendo en cuenta que la estructura está dañada y podría venirse abajo. ¡Ninguna foto merece poner tu vida en peligro!

Buerba

Buerba fue el lugar elegido para establecer nuestro campamento base. A pesar de no ser un lugar estratégico para visitar el Pirineo Aragonés (como puedes comprobar, las distancias en estas carreteras son cortas pero llenas de curvas), buscábamos un lugar tranquilo y apartado en el que poder disfrutar viendo las estrellas por la noche o viendo amanecer rodeados de montañas mientras desayunábamos en el jardín de la que fue nuestra casa durante estos días. ¡Y lo encontramos justo aquí!

Casa en el Pirineo (Buerba, España)
Nuestro hogar en el Pirineo (Buerba, España)

Nuevamente nos encontramos con un pueblecito de pequeñas dimensiones perteneciente a Fanlo. Aunque a primera vista estos pueblos no parezcan tener gran importancia, a veces es necesario echar un vistazo a la historia para darles la que merecen. ¿Sabías que gran parte de las casas que vemos en la actualidad son originarias del Siglo XVI? Casa Laplaza, Casa Tomás, Casa Maruja… son buena muestra de la importancia que debió tener este apartado rincón en algún momento del pasado. También la Iglesia de San Miguel, un austero templo situado junto a la plaza. En esta misma plaza vemos la escultura de una mujer con un cántaro. Es el particular homenaje de este pueblo a las mujeres que durante tantísimo tiempo han sido responsables de acarrear agua para abastecer a sus familias.

Iglesia de San Miguel (Buerba, España)
Iglesia de San Miguel (Buerba, España)

Vió

A pocos pasos de Buerba, encontrarás un sendero con una señal que indica el camino a Vió, nuestro próximo destino. A lo largo del sendero, sencillo aunque empedrado, ascenderemos poco a poco mientras disfrutamos de unas bonitas vistas panorámicas del valle (aunque, si te contamos un secreto, las mejores vistas, las de la foto que encabeza este post, están una vez pasado el pueblo).

Vistas en el camino de Buerba a Vió (Valle de Vió, España)
Vistas en el camino de Buerba a Vió (Valle de Vió, España)

Lo primero que nos llama la atención al llegar a Vió es que, al contrario que Buerba, sus calles no están asfaltadas. Con el aspecto actual del pueblo, resulta fácil imaginar cómo fue la vida aquí en otros tiempos. No en vano, el origen de algunas de sus casas se remonta al Siglo XVI. ¡Casi nada!

Sin darnos cuenta, llegamos hasta la Iglesia de San Vicente, un templo románico del Siglo XIII situado en una pequeña elevación del terreno. Según algunos historiadores, se trata de la iglesia románica más antigua de todo el Valle de Vió. Su inspiración lombarda deja intuir que, en el momento de su construcción, todavía no se había difundido el estilo románico jaqués. ¡Curioso encontrar algo así en un lugar con tan poca relevancia en la actualidad! Desgraciadamente, uno de sus principales atractivos (sus pinturas románicas) ya no se encuentra adornando sus paredes. En 1976, momento de su descubrimiento, se decidió retirarlas y trasladarlas al Museo Diocesano de Barbastro. Si tienes la suerte de encontrar la ermita abierta, podrás ver en su interior una reproducción de las originales (aunque para nosotros no es lo mismo).

Iglesia de San Vicente (Vió, España)
Iglesia de San Vicente (Vió, España)

El Cañón de Añisclo

¿Eres un apasionado senderista? ¿Sabías que alguno de los puntos más famosos del Cañón de Añisclo forman parte del municipio de Vió? ¡Entonces no puedes perderte la ruta que una este paraje con el pueblo!

Al poco de salir de Vió ya podrás disfrutar de una espectacular panorámica que te dejará con la boca abierta (al menos así nos sucedió a nosotros). A medida que desciendas te irás adentrando en un bello bosque cada vez más húmedo y espeso, en el que el musgo va ganando protagonismo a cada paso. Prepara tus piernas para una importante bajada (¡y subida!), ya que aunque el trayecto sea corto es intenso. ¡Pero te aseguramos que vale la pena! Te animamos a leer el post en el que hablábamos con detalle de este lugar y de los lugares que no te puedes perder. ¡Lo tienes enlazado en el párrafo anterior!

Bosque del Cañón de Añisclo (Vió, España)
Bosque del Cañón de Añisclo (Vió, España)

En resumen…

Como puedes ver, el Valle de Vió es un gran desconocido repleto de atractivos para todo aquel que se atreva a adentrarse en él. Cerca de aquí también puedes encontrar otros tantos lugares que bien merecen una visita: pueblos abandonados como Jánovas, villas medievales y llenas de encanto como Aínsa o Boltaña, la preciosa Tella, con su conocida Ruta de las Ermitas o el famosísimo Parque Nacional de Ordesa y Monte Perdido. ¡No hay excusas para no descubrir este rincón aragonés en el que el tiempo se ha detenido!

Cuéntanos… ¿Conocías el Valle de Vió? ¿Qué lugar te gustó más o tienes más ganas de conocer? ¡Cuéntanoslo en los comentarios!

2 Comentarios

  • Enrique
    Posted julio 29, 2021 10:44 am 0Likes

    Muy bonito.

  • Enrique
    Posted julio 29, 2021 10:45 am 0Likes

    Muy bonito. Pero hay que tener paciencia en las carreteras.

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